sábado, 6 de abril de 2013

Capitulo 19 - Groningen

No esta nada mal hacer turismo el día nacional de los museos en Holanda (todos gratis!) si lo llego a saber antes igual me acercaba hasta Amsterdam, pero bueno Groningen tampoco esta mal.
Groningen es a Holanda lo que Pontevedra a España, "Las grandes desconocidas" no tienen mucho turismo, son tranquilas y todo el que las visita se enamora de estas ciudades.Igual que muchas ciudades Holandesas fundadas en la baja edad media, su centro, conserva la planta de la vieja ciudad medieval original rodeada de canales, y en el canal principal, a forma de bienvenida a la ciudad, delante de la impresionante estación de tren, de esta ciudad del norte, se encuentra el museo de la ciudad. Una serie de edificios interconectados y proyectados cada uno por un arquitecto diferente, cada cual más extraño que el anterior, pero si el exterior es extraño, el interior no le va a la zaga.
El otro museo que pude visitar, fue el museo de embarcaciones del mar del norte, ya que era en Groningen donde se manufacturaban y vendían los grandes cargamentos de tabaco que llegaban a las costas del norte de Holanda, un pequeño museo muy cuidado instalado en un pequeño viejo astillero, donde se puede conocer la historia de los cargueros típicos holandeses.
A día de hoy, en el mercado de los sábados ya no mercadea con el tabaco, como antaño, pero la plaza del mercado esta abarrotada de puestos en frente a lo que en su día fue el edificio del gremio de mercaderes, con su protector, Mercurio, sobre el frontón del gran edificio. Quesos, pescados, productos del campo, colorido, gente, y lo que queda de los grandes mercaderes de tabaco, se encuentra ahora en las afueras de la ciudad, en la compañía tabacalera Niemeyer.
Groningen (que por cierto se ronuncia Jroninga) es la ciudad holandesa de las bicicletas, y sin duda que lo es, es increíble la cantidad de bicicletas que hay por metro cuadrado y como hay que aprender a sobrevivir a ellas, por suerte los ciclistas de la ciudad están acostumbrados a sortear viandantes con una capacidad increíble, ya que en la zona central, donde se aglutinan las plazas principales, conviven las calles peatonales con los cientos de pedales.
Una ciudad con un ambiente especial y gente joven por todos lados dan muestra de que su ambiente universitario da vida a las orillas de los canales en los días que se viene acercando la primavera, al fin!! en este país.

No estuvo nada mal el día, incluso a pesar de que un pájaro encabronado se cago en la manga de mi abrigo, y se pinchó la rueda trasera de la bici, y tuve que hacer 10km a rueda pinchada de la estación a casa.

Capítulo 18 - Utrecht

En 1713 se firmó el tratado de Utrecht y con el, el fin del dominio español en Flandes, tierras donde se forjó aquella famosa frase de los invencibles tercios: 
España mi natura
Italia mi ventura
Flandes mi sepultura
En 2013, exactamente 300 años después de ese tratado donde se empezó a forjar la Europa conciliadora, "democrática" y de tratados; decidí pasar por aquí a ver que dejamos atrás.
El centro de la ciudad, con planta medieval, sigue estando atravesada por un canal, donde a sus orillas, todos los locales cuentan con terrazas, que supongo que cuando empiece la primavera se llenarán de gente, pero. . . a 0ºC ni siquiera estaban abiertos, jaja!! Hacer turismo el Domingo de Pascua no es la mejor idea del mundo, o quizás la gente no salia de casa porque creían que los españoles regresábamos a recuperar territorio, jaja!!
En el centro de la ciudad se puede ver la iglesia del Dom, bueno, la mitad de la iglesia del Dom, la otra mitad se la llevó un tornado hace casi 400años y nunca se reconstruyó, dejando en pie, media iglesia y la famosa torre del Dom, la más alta de Holanda, desde la que, en días despejado, se dice que se puede ver Amsterdam (que esta a 57km) No lo comprobé, ya que el día no era el más soleado, y la temperatura y el viento en lo alto de la torre no era lo que más me llamaba ese día y teniendo en cuenta que volveré a catar sus terrazas a la orilla del canal, la subida de los 500 escalones también estará en la agenda.
En ciertos rincones escondidos se pueden encontrar restos de antiguas construcciones en  patios de casas, o callejones que en su día guardaron las conspiraciones de la ciudad donde comenzó la reforma religiosa allá por finales del XVI. En Utrecht se palpa la atmósfera de una ciudad de idas y venidas, en ella los Romanos se estancaron en su conquista del norte de Europa, y durante cientos de años el pulso del viejo continente se podía medir por los latidos de Utrech, y a día de hoy se puede seguir notando, en sus museos de todo tipo, sus personajes famosos, como el arquitecto/diseñador Gerrit Rietveld o el gran Marco Van Basten, y en el nivel de su famosa universidad.

Una ciudad pequeña, que lo tiene todo, y por donde paso de todo, una pena que el frío no acompañase, peor volveré para comprobar, entre otras cosas, como la casa de Carlos V, en la ciudad, pasó por convento, almacén, casa oKupa y ahora hotel famoso por su gran cerveza.